La mejor causa
May 01, 2022En uno de sus viajes, Jacob Bock escuchó la historia de Fructuoso, un cristiano del siglo III d.C. que escogió ser mártir por su fe en Cristo en vez de adorar a los dioses romanos que el emperador romano exigía. Como consecuencia, Fructuoso fue quemado vivo en el anfiteatro de Tarraco (el antiguo Tarragona), un monumento que sigue en pie hoy día al lado del Mar Mediterráneo.
En el mismo viaje, Jacob también conoció a Saray, una joven de 18 años, natural de Tarragona, que, al igual que Fructuoso, no se avergonzaba de su fe en Cristo y eligió como su tesis del instituto defender su fe delante de un tribunal de profesores.
De esta forma surgió no solo la historia para el vídeo de Tarragona, sino también los elementos culturales de la misma provincia.
Fue maravilloso viajar hasta Tarragona para conocer a Saray y grabar su testimonio en un lugar tan importante para su vida como ha sido el centro de retiros Sefarad, el mismo lugar donde se entregó a Cristo con apenas 7 años, y donde ha tenido muchos encuentros con Cristo que le han marcado la vida.
Saray también fue nuestra guía a los lugares más emblemáticos de Tarragona como el anfiteatro (donde pudimos grabar parte de su historia), el acueducto, la catedral, y las murallas antiguas de la ciudad, vestigios del antiguo imperio romano.
La valentía y fe de Saray dan un buen ejemplo para la juventud cristiana para hablar de Cristo con denuedo y sin vergüenza, y también son un reto para jóvenes no cristianos para ver que seguir a Cristo es la mejor causa por la cual vivir.